Hoy quiero hablarles sobre un tema muy importante: ¡las cacas! No a todo el mundo le agrada hablar de ello (y mucho menos examinarlas), pero lo cierto es que las cacas de tu peludo pueden contarte muchas cosas sobre su estado de salud.
Por qué examinar las cacas de tu peludo
Ya que nuestros perros no pueden hablar para decirnos si se sienten bien o mal, monitorear sus cacas es una de las mejores maneras que tenemos para saber si todo va bien con su salud. Es importante que aprendas a conocer qué es normal y qué no lo es en las cacas de tu perro (o gato), para que puedas diferenciar y darte cuenta cuando algo no está bien.
Personalmente, yo reviso todas las cacas de Miel (al recogerlas) y, si noto algo extraño, no dudo en aplastarla (con la bolsa, obviamente) para analizarlo más de cerca. Quizá a algunos les pueda parecer desagradable, pero sus cacas me cuentan muchas historias sobre su estado de salud o sobre qué estaba comiendo por ahí mientras no la estaba mirando.
Las cacas de tu peludo pueden decirte:
- Si comió algo que le sentó mal.
- Si tiene parásitos intestinales.
- Si comió algo indebido (como palos, juguetes o cualquier cosa que no debería haber comido).
- Si tiene un poco de estreñimiento.
- Si tiene exceso o deficiencia de algún mineral.
- Si tiene algún problema de salud más serio, entre otras muchas cosas.
¿Cómo debe verse una caca normal?
Una caca normal debe ser firme, debe tener un poco de humedad, no debería ser demasiado grande y debería tener un olor normal (nada desagradable que te haga arrugar la cara).
El color de unas cacas normales suele ser marrón medio (no muy claro, no muy oscuro), aunque puede variar según los alimentos que haya ingerido previamente (por ejemplo, podría ser más rojizo si le diste frutos rojos o pimientos o más verdoso si le diste spirulina).
Hay una diferencia ENORME entre las cacas de los perros alimentados con pienso o alimento ultraprocesado y las cacas de los perros alimentados con dieta barf o comida natural.
Cuando Miel comía pienso, hacía caca muchas veces al día (por lo menos unas cuatro veces), las cacas eran ENORMES (cagaba más de lo que comía, literalmente), nunca eran demasiado firmes y el olor era 🤢 ¡para morirse!
En cuanto cambié a la alimentación natural quedé maravillada pues las cacas cambiaron inmediatamente: de pronto eran pequeñas, firmes, con un olor bastante razonable y solo hacía caca máximo dos veces al día (y así se mantiene hasta el sol de hoy).
Puedes leer otros beneficios de cambiar a una alimentación natural aquí.
Cacas de perros alimentados con pienso Vs cacas de perros alimentados con comida natural
Los perros que comen pienso o perrarina tienen unas cacas diferentes a las de los perros que comen comida natural. Los perros alimentados con pienso:
- Hacen caca muchas veces al día.
- Tienen cacas más grandes de lo normal.
- Suelen tener cacas con muy mal olor.
- Las cacas nunca son del todo firmes y casi siempre dejan una mancha en el suelo cuando la recoges.
La razón de esto es que, al ser un alimento ultraprocesado, lleno de carbohidratos, químicos, aditivos, exceso de fibra y azúcar, el pienso no se digiere ni se metaboliza eficientemente porque:
- El pH estomacal de los peludos alimentados con pienso es alcalino, por lo que la enzima que digiere las proteínas no se puede activar, entorpeciendo la digestión y la absorción de nutrientes.
- Su microbiota es menos diversa, lo cual afecta directamente la producción de enzimas digestivas y la capacidad de absorber los nutrientes.
- Los cereales y carbohidratos almidonados como el maíz, trigo, soja (cuidado con este, puedes leer aquí los peligros de la soja), la papa, yuca, guisantes o boniato (principales ingredientes en la mayoría de los piensos) contienen una gran cantidad de almidones resistentes que se fermentan en el intestino causando inflamación y una digestión pobre.
- Los piensos suelen tener un exceso de fibra (la cual tampoco se digiere), de químicos y colorantes que también interfieren con la digestión y con la absorción de los nutrientes.
- Las vitaminas sintéticas del pienso no son absorbidas eficientemente por el cuerpo, como sí sucede con las vitaminas naturales.
Entonces, las cacas de los peludos alimentados con pienso son de esa manera porque su digestión y absorción de nutrientes no es eficiente, lo cual por supuesto afecta su frecuencia, composición, tamaño, olor y forma.
La foto de más arriba es una foto real de una caca de Miel a sus tres meses de edad, de cuando comía pienso, al lado de una foto de una caca actual (a sus casi tres años de edad). Quizá en foto no se aprecie bien el tamaño, pero créeme cuando te digo que ¡la diferencia es bárbara!
¿Qué no es normal en sus cacas? Presta atención a las siguientes señales
Una vez que ya tienes en mente cómo son las cacas normales de tu peludo (independientemente de si come pienso o alimentación natural), podrás darte cuenta rápidamente en cuanto algo cambie. Presta especial atención a las siguientes señales:
Cambios de consistencia
Algunas veces podemos notar que sus cacas están más blandas o más duras de lo normal y esto puede deberse a diversas causas. Si es cosa de una sola vez, lo más probable es que se deba a algo que comió y todo debería volver a la normalidad en un par de días.
Sin embargo, si tu peludo empieza a hacer cacas cada vez más blandas o cada vez más duras, ya estaríamos hablando de diarrea o estreñimiento, lo cual merece atención especial por tu parte.
Diarrea
La diarrea es una de las señales más obvias de que algo no anda bien con nuestro peludo. Las diarreas pueden ocurrir sin que necesariamente se deban a un problema de salud serio, sencillamente porque tu peludo comió algo que le sentó mal y su organismo utiliza la diarrea para expulsarlo, como una manera natural de sanar su sistema digestivo.
➡ Si tu peludo tiene diarrea te recomiendo seguir estos 5 pasos para tratarla efectivamente. ⬅
⚠ Sin embargo, si la diarrea no desaparece en un par de días, es importante que acudas a tu veterinario para determinar la causa y seguir un tratamiento adecuado para su recuperación.
Presta especial atención a las diarreas o heces con sangre o si notas gusanos o huevos (ya que es una clara señal de parásitos).Si eso ocurre, no esperes para consultar a tu veterinario❗
Estreñimiento
Si las cacas de tu perro están muy firmes (sin nada de humedad) y de color marrón muy claro (tirando a amarillo) o blanco, o si notas que a tu peludo le cuesta defecar, es muy probable que esté un poco estreñido.
El estreñimiento es más común en perros que comen una dieta natural que en perros alimentados con pienso, y usualmente se debe a un exceso de calcio en la dieta derivado de un exceso de huesos carnosos. Esto es fácilmente corregible disminuyendo el porcentaje de huesos y aumentando el de carne o vísceras, además de asegurarnos de que beban suficiente agua.
Otras causas del estreñimiento pueden ser: deshidratación (una de las más comunes), obstrucciones intestinales, el efecto de algunos medicamentos, estrés, entre otras.
Si tu perro está estreñido, asegúrate de que beba suficiente agua para mantenerlo hidratado, añade probióticos (yogurt o kéfir) y prebióticos (alimentos con fibra como los espárragos, espinacas o manzanas, todo triturado). Si la situación no mejora en un par de días, consulta con tu veterinario para determinar la causa y el tratamiento a seguir.
Heces con moco
Las heces con moco pueden deberse a diferentes causas, entre ellas los cambios en la dieta (como suele ocurrir cuando cambiamos del pienso a una dieta natural), o a otras causas más serias como parásitos intestinales, inflamación del colon, intoxicación, ingesta de un objeto extraño, entre otros.
Si tu peludo hace caca con moco varias veces seguidas, no dudes en consultar con tu veterinario para determinar la causa.
Cambios de color
El color de las cacas de tu peludo puede variar dependiendo de lo que haya comido o puede ser un indicador de algún problema mayor. Si la caca de tu peludo presenta un color inusual recuerda primero qué comió previamente, ya que algunos alimentos pueden alterar un poco el color de las cacas.
Los alimentos rojos (frutos rojos o pimientos), naranjas (zanahoria, calabaza) o verde oscuro (spirulina) pueden tornar las cacas de un color rojizo, anaranjado o verdoso, respectivamente. Por otro lado, unas cacas blancas podrían significar exceso de calcio (huesos) en una dieta natural.
Sin embargo, existen ocasiones en las que un color diferente en las cacas puede revelar un problema más serio:
- Cacas con sangre: la presencia de sangre fresca en las heces indica que hay un sangramiento desde el cólon, el ano o las glándulas anales. ⚠ Si ves sangre en las heces de tu peludo no dudes en acudir a tu veterinario. ❗
- Cacas negras: las cacas muy negras indican la presencia de sangre en algún lugar del tracto digestivo de tu peludo, aunque también podría deberse a un exceso de hierro.
- Cacas amarillas: podría deberse a exceso de huesos carnosos o algún problema más serio como parásitos. Si tu peludo está constantemente haciendo cacas amarillas, no dudes en consultar con tu veterinario.
Recuerda vigilar muy bien en busca de cualquier señal anormal y no dudes en consultar con tu veterinario si la situación persiste. Alimentarlos con una dieta biológicamente apropiada para su especie será la mejor manera de proteger su sistema digestivo y su organismo de diferentes enfermedades.
Si tu peludo está pasando por algún problema digestivo, te recomiendo que leas este artículo en donde te explico cómo lidiar con estos problemas y qué tipo de dieta es la ideal para esos casos.
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Muy bueno el contenido del artículo. Me será de mucha ayuda con mi perrita. Muchas gracias. Ahora sabré mejor cómo velar por la salud de mis mascotas.
Muy buena información gracias
Sos una genia!
Me diste mil y una herramientas para la alimentación de mí peludo
Gracias!
Gracias a ti por leerme y por comentar 🥰
Excelente artículo! Muchísimas gracias, de verdad me ayuda muchísimo, sobre todo porque uno cree que la caca está bien cuando comen perrarina (pienso) y leer el artículo me aclaro todo! Gracias jess!
Me alegra que te haya ayudado ????